Opinión

Promisoria visita del Presidente de España

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31 de agosto de 2018, 4:00 AM
31 de agosto de 2018, 4:00 AM

La histórica visita de Pedro Sánchez a Bolivia marca un hito en las relaciones con el Reino de España con importantes inversiones económicas que permitirán un mayor desarrollo para los bolivianos.

El presidente Evo Morales y su par español firmaron un acuerdo que permitirá la participación de España en el mega proyecto para la construcción de un tren bioceánico, entre el Atlántico y el Pacífico, que permita trasladar las exportaciones brasileñas desde el puerto de Santos hasta Ilo (Perú) y su posterior conexión con los mercados de Asia, en particular, el de China, uno de los más grandes del mundo.

Además, la presencia del mandatario español permitió realzar la cooperación española que, con su correspondiente contraparte del Estado boliviano, alcanzó unos 124 millones de dólares para proyectos de agua potable y de riego para la producción agrícola.

Decenas de comunidades rurales se han beneficiado con estas inversiones en planes de agua, un elemento clave para la vida de las personas y el desarrollo productivo.

No fueron menores los acuerdos firmados para fortalecer la justicia y consolidar la cooperación bilateral. España tiene especial interés en la modernización de la justicia como elemento sustancial para impulsar el desarrollo de la democracia boliviana.

Para ratificar la cercanía de su país con Bolivia, Sánchez aseguró que no deberían pasar otros 20 años antes de que un mandatario ibérico pueda visitar oficialmente el país, dados los vínculos sociales, culturales y económicos entre ambos países.

Una treintena de empresas españolas, con Repsol a la cabeza, son la prueba cabal de que España apuesta por el crecimiento de Bolivia a través de inversiones acumuladas que superan los 1.800 millones de dólares.

Llamativamente, Morales no acudió a la muletilla ideológica de los 500 años de colonización española y, más bien, remarcó la importancia que tiene hoy la ayuda española para la vinculación de nuestro país con la Unión Europea, uno de los destinos fundamentales para las exportaciones nacionales.

La imposición del Cóndor de los Andes fue el símbolo más evidente de la importancia que le dio Morales a la visita de Sánchez para los diversos programas productivos.

Ojalá la “España grandiosa”, como dice el himno cruceño, fortalezca así sus vínculos con Bolivia y atrás dejemos los rencores ideológicos que ningún bien hacen a las relaciones entre ambas naciones.

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