El Deber logo
12 de noviembre de 2017, 4:00 AM
12 de noviembre de 2017, 4:00 AM

A 240 kilómetros de la ciudad de La Paz se encuentra Quime, población cabecera de valle perteneciente a la provincia Inquisivi del departamento de La Paz, lugar que preserva un legado histórico, conservado por la pasión, amor, entrega y servicio de sus pobladores y, en especial, por una de sus familias que la habitan. Fue a invitación del Club del Libro 13 de Octubre - Rosaline de Urquiola que llegamos a esta población para realizar una pequeña investigación, que los quimeños afirman es un legado histórico: la plazuela Urquiola.

El aroma a eucalipto y un clima agradable son los primeros en recibirnos al llegar a Quime y apenas arribamos nos dirigimos a la plazuela Urquiola; ahí encontramos a Rubén Urquiola Sarmiento, bisnieto de Felipe Urquiola, quien alrededor de 1880 llegó a este territorio para adquirir tierras y formar allí su hogar y familia. Es así que construyó su casa y junto a su hijo, de nombre Santiago, dispuso un espacio para erigir una plazuela tal como consta en el documento de la Junta Municipal del 21 de diciembre de 1926; ya son cinco generaciones hasta el día de hoy que dedican su amor y preocupación, desde su creación, a la construcción y mantenimiento de este sitio tradicional de la población.

Con una extensión de 2.500 m², fue embellecida y rebosada de amor y alegría con un empedrado de estilo colonial; en el centro ahora se puede ver un quiosco construido en 1969, como menciona don Rubén Urquiola: “Antes había una fuente de piedra en ese lugar”.  

La plazuela está rodeada por varias construcciones de diversos estilos; en la parte sur hay una vivienda de dos pisos de estilo neoclásico que dataría de 1880, los propietarios son la familia Jáuregui Urquiola.

En la parte este resaltan dos construcciones de estilo colonial con balcones, una de estas construcciones fue destinada en tiempos de la Guerra del Chaco como alojamiento para un contingente de prisioneros de guerra paraguayos. Al lado está, y no sin menos valor, el inmueble de don Rubén Urquiola, quien nos cuenta que en estas viviendas vivió su padre, el señor Teodomiro Urquiola, que fue diputado dos veces, entre los años 1932 y 1936 y de 1940 a 1944, aproximadamente, y fue él quien otorgó una vivienda para el alojamiento de los prisioneros paraguayos. Así también en los años de la Guerra del Chaco Teodomiro Urquiola emprendió la tarea de plantar árboles de eucalipto en la región, acción que ahora hace de Quime parte de su identidad. El constante servicio y trabajo de Teodomiro Urquiola hizo que la plazuela que le vio crecer adopte su nombre, y el 11 de diciembre de 2009 una parte de esta sea declarada Patrimonio Cultural e Histórico de Quime,  según una ordenanza municipal.


Quime fue y es testigo de momentos de la historia de Bolivia desde su origen, hitos como la leyenda de Choquercamir verbita y sus construcciones incas; el gesto revolucionario de Pedro Domingo Murillo, que nació en Suri, cerca de Quime; la formación de nuestra República y la Republiqueta Ayopaya; la resistencia y lucha en la Guerra Federal y la contienda de Mosa;  el auge de la minería a partir de 1914;  la Guerra del Chaco y la reconquista de la democracia gracias a la resistencia de los mineros Caracoles y Chabillaya en los años 80 hacen de Quime un sitio común de alto valor histórico.

La plazuela Urquiola guarda la memoria e identidad de Quime, es testigo y prueba del servicio y amor de la familia Urquiola, ahora representada por Rubén Urquiola, que manteniendo la línea de compromiso con su pueblo gestionó varias obras, entre las cuales podemos resaltar el asfaltado de la carretera Konani - Quime, sin dejar de lado las escuelas y centros culturales. Solo nos queda rendir homenaje a los hombres y mujeres de Quime que dieron su vida por brindarnos la posibilidad de conocer este pueblo lleno de amor e historia.

Tags