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27 de febrero de 2018, 4:00 AM
27 de febrero de 2018, 4:00 AM

El minero Juan Carlos Huarachi es el nuevo ejecutivo de la Central Obrera Boliviana, que vuelve a ser aliada del Gobierno después del sonado desmarque protagonizado por el anterior ejecutivo, Guido Mitma. El oficialismo se saca de encima una especie de tranca en su camino de búsqueda de otra reelección de Evo Morales, considerando que la nueva directiva cobista se ha declarado incondicional al llamado “proceso de cambio”. La COB fue pieza clave en las movilizaciones opositoras y ciudadanas de diciembre y de enero, a la cabeza de Mitma; sin embargo, el exdirigente terminó flaqueando y cedió la conducción del ente sindical al oficialismo. El apoyo de la Central Obrera a Evo está, sin embargo, condicionado a que se les ofrezca mayor espacio de poder e incluso a que el compañero de fórmula de Morales sea un obrero. El alza salarial y el pago del doble aguinaldo también están en la primera línea de la agenda de negociaciones.

 

Mientras los vecinos del Urubó sufren por las restricciones de tráfico en el único puente que vincula a la zona, empresarios del proyecto Urubó Village aguardan también ya con preocupación que les autoricen la construcción de una segunda y moderna infraestructura de conexión. Ya tienen los estudios y prácticamente el financiamiento, pero falta la acción política que destrabe un emprendimiento urgente.

 

Hoy se cumplen dos semanas de la segunda explosión con muertos en Oruro y no se tienen hasta ahora conclusiones contundentes de las investigaciones de los responsables de tan terrible tragedia, conectada también a la que ocurrió el sábado de carnaval. Necesitamos explicaciones claras de lo sucedido. 

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