El mandatario quiere a su país “primero pero no en solitario”. Luego de su discurso fue abucheado por criticar a la prensa

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27 de enero de 2018, 7:00 AM
27 de enero de 2018, 7:00 AM

El presidente de EEUU, Donald Trump, dibujó ayer ante la élite mundial de Davos un país con una economía floreciente tras un “gran año” bajo su Presidencia, pero no pudo escapar a la polémica por sus críticas a la prensa y las presuntas conexiones con Rusia.

“EEUU primero no quiere decir EEUU en solitario”, dijo ante una audiencia selecta de empresarios y líderes políticos en un discurso de 15 minutos, en el que prometió “cooperación” y “amistad” con el resto del planeta.

“Hemos tenido un gran primer año, exitoso, de muchas maneras distintas”, aseguró obviando las polémicas que han marcado su primer año en la Casa Blanca.

Sin embargo, terminado el discurso y cuando respondía a preguntas de Klaus Schwab, el fundador del WEF, reiteró sus ataques a la prensa.
“Hasta que me convertí en político no me di cuenta de lo cruel, mala y falsa que puede llegar a ser la prensa”, dijo Trump, de 71 años, provocando los abucheos de parte de las 1.500 personas en la sala.  

Por la mañana Trump se reunió con Paul Kagame, el presidente de Ruanda y de la Unión Africana, y le pidió que transmitiera sus saludos a los líderes africanos poco tiempo después de que calificara a algunas naciones africanas, así como a Haití y El Salvador, de “países de mierda”.
 "No podré ir al discurso, tengo trabajo", dijo la ruandesa Winnie Byanyima, directora ejecutiva de Oxfam, que como otros líderes y empresarios africanos pidió boicotear su intervención.

 Tras el discurso, Byanyima reiteró que la política de Trump solo beneficia a los más ricos mientras "el resto del planeta se pelea por las migajas".