Evo Morales, Jaime Paz Zamora, Carlos Mesa, Tuto Quiroga, Óscar Ortiz y Samuel Doria Medina manifestaron su tristeza por el trágico final del expresidente peruano

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18 de abril de 2019, 4:00 AM
18 de abril de 2019, 4:00 AM

Era 1979. Hernán Siles Zuazo y Jaime Paz Zamora habían ganado las elecciones sin obtener la mayoría absoluta. El Congreso, luego de empantanarse había designado presidente a uno de los suyos, Wálter Guevara. Los ganadores marcharon al exilio en Lima. Cuando llegó noviembre, Alberto Natush Busch tiñó de sangre Todos Santos con un golpe de Estado, Siles y Paz Zamora decidieron volver clandestinos a la patria. Un joven largo y flacucho, que era secretario del partido peruano APRA, llamado Alan García, los acompañó hasta la frontera y, guiados por un campesino, los hizo cruzar Los Andes. A los 80 años, el día que ese joven decidió pegarse un tiro antes de ir preso por supuesta corrupción, Jaime Paz Zamora lo recuerda de manera vívida: “Era el típico paisaje altiplánico. Por orden de Armando Villanueva, jefe del APRA, con la ayuda de un campesino peruano, Alan nos llevó hasta un paso clandestino. A las 11 de la noche nos despedimos en la frontera. Alan se quedó ahí, nosotros seguimos”, cuenta Paz Zamora y añade: “Al día siguiente nos detuvieron en Copacabana y nos trasladaron a Tiquina”.

Jaime fue el político boliviano que más sentimiento le puso a su obituario para García, fallecido ayer en Lima tras dispararse en el momento que iba a ser arrestado. Lo recordó como “compañero y amigo”. También se pronunció el presidente Evo Morales. “Conmovidos con la muerte del expresidente de Perú, Alan García. Nos sumamos al dolor de la familia y enviamos nuestras sinceras condolencias. Paz en su tumba”.

En esa misma línea, Óscar Ortiz, candidato presidencial de Bolivia Dice No, escribió en Twitter: “Lamento el trágico fallecimiento del ex presidente del Perú, Alan García, elevando mis oraciones a Dios por él y por su familia. Fortaleza y resignación en estos difíciles momentos”. También Samuel Doria Medina, jefe de UN, y el expresidente Tuto Quiroga ofrecieron sus condolencias. Carlos Mesa, se apartó un poco del guion oficial y aseguró que “más allá de cualquier valoración circunstancial, Alan García fue una de las figuras más relevantes de la política latinoamericana contemporánea”.

Paz Zamora sí hizo la valoración circunstancial. Calificó la noticia de la muerte de su amigo como ‘dramática’ y cree que debe ser objeto de un análisis más amplio. “No puede ser que unas empresas brasileñas hayan generado un cataclismo de corrupción en todos sus países vecinos”, exclamó.

Pero esa fría noche de noviembre de 1979 no fue la última vez que Paz Zamora y García se encontrarían cerca del lago. Repitieron el encuentro en 1989, cuando ambos eran presidentes, García de Perú y Paz de Bolivia. Hicieron una reunión en un barco, justo en la frontera, sobre el lago Titicaca. Una periodista le preguntó a García si él hubiera aceptado un corredor soberano para Bolivia sobre Arica, territorio que antes de la Guerra del Pacífico fue peruano. Respondió que sí. “Alan fue el primer presidente peruano que dijo que aceptaría un corredor boliviano por Arica”, valoró. Para él, este fue un precedente importante. Luego, ambos salieron a cubierta y, mientras miraban el lago, Jaime le preguntó si recordaba aquella noche que lo ayudó a cruzar la frontera no muy lejos de allí. “Claro que me acuerdo y ese es uno de los hechos que más me llena de satisfacción de mi etapa de lucha por la democracia”, le respondió.