Durante la madrugada de este lunes los gendarmes comenzaron a cerrar los accesos a las cárceles chilenas y a partir de ahora no se permitirá la salida ni el ingreso de presos.

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7 de noviembre de 2018, 21:27 PM
7 de noviembre de 2018, 21:27 PM

Los gendarmes (guardias de prisiones) de Chile aumentaron la intensidad de su huelga, que este miércoles cumple tres días, y declararon desde esta noche un acuartelamiento generalizado en los penales del país y una huelga de hambre "masiva" en la penitenciaría de Santiago. La Asociación Nacional de Funcionarios Penitenciarios (Anfup) informó este miércoles del recrudecimiento de la protesta, a través de un comunicado en su página web, para exigir mejoras laborales.

Según los dirigentes, la huelga actual es indefinida y tiene una adhesión a nivel nacional de 20.000 funcionarios. Desde el Gobierno, el subsecretario de Justicia, Juan José Ossa, tildó la movilización de "ilegal", por lo que se podrían aplicar descuentos en los salarios de los trabajadores que secunden el paro, según informó el diario La Tercera.

La huelga comenzó este lunes después de que la semana pasada, dirigentes de los sindicatos de gendarmes se reunieron con representantes del Gobierno para tratar de llegar a un acuerdo y evitar el paro, pero no fue posible. Entre sus principales demandas destacan varios puntos para mejorar la carrera funcionaria, como un bono de incentivo para la jubilación o una mejor distribución de las plantas de trabajadores.

Durante la madrugada de este lunes los gendarmes comenzaron a cerrar los accesos a las cárceles chilenas y a partir de ahora no se permitirá la salida ni el ingreso de presos, excepto en casos especiales y de urgencia. Esto ha estado afectando el funcionamiento de los tribunales de justicia, puesto que los gendarmes no colaborarán en el traslado de los reos a las audiencias de formalización.

A finales de junio, los gendarmes habían anunciado la convocatoria de otra huelga a nivel nacional que finalmente no tuvo lugar tras un acuerdo en la madrugada previa al inicio del paro entre los dirigentes gremiales y el ministro de Justicia, Hernán Larraín.