El Código Penal vigente desde 1921 considera el aborto un delito, aunque contempla que "no es punible" cuando es necesario evitar un peligro para la salud de la mujer o cuando el embarazo es producto de una violación

El Deber logo
11 de junio de 2018, 12:20 PM
11 de junio de 2018, 12:20 PM

Decenas de estudiantes celebran hoy asambleas en una veintena de escuelas y facultades de Buenos Aires para evaluar si toman los centros educativos en apoyo al proyecto de despenalización del aborto que se debate este miércoles en la Cámara de Diputados.


"Consideramos que la derogación del artículo que daba la potestad a una adolescente de poder abortar atenta contra los derechos de las jóvenes, las más vulnerables en cuanto al aborto", señaló este lunes Malena, del Centro del Estudiantes de la Escuela de Bellas Artes Rogelio Yrurtia, la única de la ciudad que ya está ocupada por los alumnos.


En declaraciones a la agencia estatal Télam, señaló que a lo largo del día, en el centro, que está tomado desde el viernes, realizarán asambleas informativas y decidirán si pasan hoy la noche y si el miércoles acuden a la vigilia que está convocada en los alrededores del Congreso para esperar la votación de la iniciativa.


La nueva iniciativa establece que toda persona gestante puede interrumpir voluntariamente su embarazo durante las primeras catorce semanas de gestación y, después de ese plazo, en los dos casos permitidos hoy o si existen malformaciones fetales graves.


Entre el 10 de abril y el 31 de mayo, 700 personas, a favor y en contra del aborto, participaron en las audiencias celebradas todos los martes y jueves en comisión parlamentaria para esgrimir argumentos a favor y en contra de la ley.


Este miércoles llegará a la Cámara de Diputados, donde alrededor de un centenar de legisladores ya manifestó su postura favorable y otro centenar, la contraria, por lo que la posible aprobación del proyecto y su envío al Senado está en manos de unos 30 indecisos.


Además de los actos y movilizaciones convocados por el movimiento feminista local, el alumnado de Buenos Aires analiza si tomar las escuelas para visibilizar su apoyo al proyecto y pedir que, además, se implemente la Ley de Educación Sexual Integral (ESI) y un protocolo para prevenir la violencia machista en los centros educativos del país