La compañía, que también ha despedido a dos altos cargos de la empresa tras lo sucedido, pidió disculpas en un comunicado y dijo que asumirá su responsabilidad ante los problemas de seguridad

El Deber logo
26 de agosto de 2018, 7:39 AM
26 de agosto de 2018, 7:39 AM

La multinacional de transporte china Didi Chuxing, equivalente a Uber, anunció hoy que suspenderá temporalmente su servicio de coche compartido tras la violación y asesinato de una cliente por uno de sus conductores, el segundo asesinato en las mismas circunstancias que ocurre en los últimos tres meses.

La compañía, que también ha despedido a dos altos cargos de la empresa tras lo sucedido, pidió disculpas en un comunicado y dijo que asumirá su responsabilidad ante los problemas de seguridad que presenta el servicio, aunque no ha precisado ni la duración de la suspensión ni qué medidas de seguridad adoptará para garantizar la integridad de los usuarios.

La Policía informó de que el pasado viernes una mujer de 20 años desapareció después de coger un coche compartido de Didi en la ciudad de Wenzhou, en el este del país, y enviar un mensaje a sus amigos pidiendo ayuda.

La mujer fue violada y asesinada por el conductor del vehículo, que ya ha sido detenido por la Policía y confesó la autoría de los hechos, según detalló hoy la agencia estatal Xinhua.

Didi aseguró que el conductor no tenía antecedentes penales, pero estaba usando una matrícula falsa cuando cometió el crimen, por lo que ha decidido suspender a partir de mañana el servicio de coche compartido en el país para revisarlo y mejorarlo.

El pasado mes de mayo, el asesinato de otra cliente de 21 años a manos de su conductor en Zhengzhou (centro) ya encendió las alarmas en el país asiático sobre la seguridad de la plataforma.

Entonces, Didi también decidió suspender este servicio durante unos días y modificó algunas de sus características en un intento de mejorar el servicio.

En China, la compañía es líder en servicios de alquiler de vehículos vía móvil, ofrece el servicio de coche compartido e incluye también el alquiler de taxis convencionales, con lo que consiguió acabar con las frecuentes protestas de los taxistas chinos ante la proliferación de este tipo de negocios.

En los últimos meses, Didi se ha internacionalizado y en enero adquirió en Brasil a uno de sus rivales, mientras que en abril lanzó su propio servicio en México.

La compañía, valorada a finales de 2017 en unos 56.000 millones de dólares, está considerando la posibilidad de salir a bolsa en el segundo semestre de este año, aunque el gigante chino del transporte aún no ha confirmado estos planes.