El Partido Comunista sigue controlando todas las instituciones, pero se abre a una reforma económica fundamental que impulsó el expresidente Raúl Castro

El Deber logo
26 de febrero de 2019, 4:00 AM
26 de febrero de 2019, 4:00 AM

El proyecto de nueva Constitución de Cuba, que sustituye a la vigente desde 1976, fue respaldado por el 86,8% de los votantes en el referendo celebrado ayer domingo, en el que la participación fue del 84,4%, según los datos preliminares anunciados ayer.

De los 7.848.343 millones de votos depositados, el 86,8 % fue para aceptar el nuevo texto, el 9 % para rechazarlo y el 4,1 % restante correspondió a votos en blanco o nulos, informó en una rueda de prensa la presidenta de la Comisión Electoral Nacional (CEN), Alina Balseiro.

La nueva Constitución no modifica el sistema político no democrático de la isla, que está supeditado al Partido Comunista de Cuba (único), ni renuncia al comunismo, pero sí plasma los cambios económicos y sociales producidos en el país en la última década tras las reformas introducidas durante los dos mandatos del expresidente Raúl Castro (2008-2018).

De acuerdo con las cifras facilitadas por la CEN, votaron “sí” un total de 6.816.169 cubanos y por “no” lo hicieron 706.400.

Los votos en blanco fueron 198.674, para un porcentaje del 2,53 %, y los nulos sumaron 127.100, lo que supone un 1,62% del total.

Al censo inicial de 8,6 millones de votantes se le añadieron en la jornada del referendo 634.000 personas debido a que en Cuba, aunque lo habitual es votar en el lugar de empadronamiento, no se trata de un requisito obligatorio, por lo que hubo personas que pudieron votar en otros lugares.

Ello provoca un desvío del registro electoral, que “en los próximos días” se actualizará para obtener las cifras definitivas de la votación, precisó Balseiro.

La presidenta de la CEN declinó valorar los resultados porque los miembros de esa entidad “no son autoridades políticas”, pero destacó que la jornada de la consulta se desarrolló “como una fiesta electoral, con tranquilidad y concurrencia a las urnas”.

Preguntada sobre los motivos por los que los cubanos residentes en el extranjero no pudieron votar pese a que sí participaron -por vez primera- en el proceso popular de consultas previas al que se sometió el borrador inicial de la Constitución entre agosto y noviembre pasados, indicó que se ha “cumplido estrictamente” lo que determina la Ley Electoral.

Según la funcionaria, la CEN fue ajena al proceso de redacción y debate popular del texto constitucional, diferente del referendo del domingo.

“La Ley Electoral establece unos requisitos para el derecho al voto que no se corresponden con los de la consulta popular”, adujo, y añadió que para poder votar, el elector “tiene que tener dos años de residencia en el país”, entre otros requisitos.

En Cuba no se celebraba un proceso de este tipo desde 1976, cuando se votó la actual Carta Magna, un texto a la medida del entonces mandatario Fidel Castro y de los tiempos de la Guerra Fría que fue refrendado por el 97 % de los votantes, con una abstención del 2 %.

Tags