Los residuos encontrados en cerámica neolítica de h ace 8.000 años, revelan que el origen de la viticultura se dio casi 1.000 años antes de lo que se estimaba

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19 de noviembre de 2017, 6:00 AM
19 de noviembre de 2017, 6:00 AM

El origen de la viticultura se remonta a más de 8.000 años, casi 1.000 antes de lo estimado, revelan residuos en cerámica neolítica hallada en Georgia, en el sur del Cáucaso. Los indicios químicos más antiguos de la producción de vino databan de 5.400 años antes de la era cristiana en las montañas de Zagros (Irán) hasta el hallazgo divulgado esta semana en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences.  
La excavación se centró en dos yacimientos de cerámica del Neolítico que datan de entre 8.100 y 6.600 años, Gadachrili Gora y Shulaveris Gora, a 50 km de Tbilisi.  

El análisis de jarras milenarias reveló la presencia de ácido tartárico, la firma química de las uvas y del vino. También se detectaron los ácidos málico, succínico y cítrico ligados a la viticultura.  

“En Georgia tal vez se domesticó la vid y comenzó la viticultura”, dice Patrice This, jefe de investigación del Instituto Nacional de Investigación Agrícola de Francia.  

Hoy existen más de 10.000 variedades de vid domesticada, pero solo hay  500 de ellas en Georgia. Esto sugiere que la uva fue objeto de cruces para crear diferentes cepas hace mucho tiempo en esa región.  La combinación de datos arqueológicos, químicos, botánicos, climáticos y de datación muestra que la variedad Vitis vinifera era abundante en los sitios de excavación en Georgia.  

En el Neolítico, el clima local era similar al de hoy en Italia y Francia. La mayoría de las uvas clásicas, como cabernet sauvignon o merlot, son de esta especie. “La viticultura fue centro de la vida del neolítico en Oriente Medio, nació con la agricultura”, opina Stephen Batiuk, profesor de Arqueología en la Universidad de Toronto.