El teléfono celular será una especie de control remoto de los objetos del futuro
Huawei demostró que el Mate 10 Pro tiene suficiente inteligencia artificial para conducir un automóvil. Presentaron audífonos que reducen el apetito y se puede hacer seguimiento a la pérdida de peso vía celular. Nokia revivió el teléfono banana
Un automóvil conducido mediante inteligencia artificial desde un teléfono inteligente de alta gama, realidad aumentada, visión que atraviesa paredes... los dispositivos electrónicos presentados en el Mobile World Congress (MWC) en Barcelona tienen su eje en el teléfono móvil, que se convierte en una especie de control remoto de los objetos del futuro.
Estas son las principales novedades que causaron impacto durante el segundo día del congreso mundial. La primera de ellas fue la presentada por el gigante chino Huawei, que llevó a la realidad la primera prueba de conducción autónoma realizada con la ayuda de un teléfono inteligente, el Mate 10 Pro, gracias a la inteligencia artificial.
El vehículo, un deportivo ultra-rrápido alemán equipado con una cámara en el techo, “no solo detectó, sino que además entendió los estímulos que recibió a su alrededor y pudo distinguir entre 1.000 objetos diferentes, incluyendo un gato, un perro, una pelota o una bicicleta”, señaló Arne Herkelmann, responsable de innovación en Huawei.
“Lanzamos el proyecto hace cinco semanas, la idea es mostrar concretamente lo que puede aportar nuestra inteligencia artificial", señaló el ejecutivo. Huawei aclaró que su prueba estaba diseñada para demostrar las capacidades de su teléfono inteligente, pero la empresa no tiene entre sus planes desarrollar un sistema de conducción autónomo para vehículos.
Otras novedades
Un equipo de ingenieros surcoreanos desarrolló un pequeño aparato circular para asegurar las bicicletas en la calle. El mismo se instala en la rueda delantera y se conecta con el teléfono inteligente del usuario vía Bluetooth. Cuando el dueño de la bici la estaciona y se aleja, se activa automáticamente este candado inteligente llamado Bisecu. Cuando regresa, el aparato lo detecta y deja de funcionar.
Si un ladrón intenta llevarse la bicicleta, le será imposible mover la rueda delantera.
Además, activará una alarma a un volumen de 100 decibeles, mientras el teléfono inteligente da la alarma al dueño.
Por otro lado, la empresa emergente británica Neurovalens presentó unos audífonos que emiten un leve pulso eléctrico que envía una señal al cerebro para controlar el apetito, quemar grasa y así adelgazar. El presidente de la compañía, Jason McKeown, aseguró que el 80% de las personas que han usado los audífonos Modius han perdido peso. El aparato trae una aplicación que permite al usuario seguir sus avances.
Otra novedad surrealista es la capacidad de ver a través de las paredes. Esto es posible gracias a la compañía israelí Vayyar, que desarrolló un sensor que usa señales de radio para ver a través de distintos materiales. Se coloca el sensor en el teléfono y se pone el aparato en la pared, y lo que esta esconde en su interior aparecerá en la pantalla: madera, cemento, cables eléctricos, lo que sea.
Y los anteojos de realidad aumentada también causaron furor porque permitirán ver las notificaciones que llegan al teléfono móvil. La desarrolladora es la empresa estadounidense Vuzix.
Estos anteojos casi idénticos a unos normales aunque con los cristales ligeramente teñidos, pueden, por ejemplo, ofrecer direcciones mediante un GPS o si el usuario quiere tomar una foto, no hace falta sacar el teléfono del bolsillo. Basta tocar uno de los lados de los anteojos y abrir la aplicación de fotografía, observar lo que se quiere capturar y los anteojos tomarán la foto.
