Se suma a la lista de gigantes tecnológicos que priorizan ambientes naturales para propiciar la productividad

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3 de febrero de 2018, 6:00 AM
3 de febrero de 2018, 6:00 AM

Amazon inauguró un espacio de trabajo alternativo que no tiene oficinas ni escritorios. Lo que sí abunda es mucha naturaleza. La empresa de comercio electrónico fundada por Jeff Bezos, el hombre más rico del mundo, ha sorprendido, después de seis años de construcción con un apéndice de su sede en Seattle: un edificio conformado por tres grandes esferas de cristal en cuyo interior han creado una suerte de selva tropical. 


Las Esferas, como ha sido llamada la enorme edificación hecha de vidrio y metal, contienen más de 40.000 plantas de 400 especies distintas, la mayor parte de las cuales crecen en zonas tropicales y subtropicales.


También hay una higuera de 15 metros de alto y 16 toneladas de peso, que fue sembrada en 1969 en una granja de California y que ahora fue trasplantada a las oficinas de Amazon.


En el interior del edificio las luces están programadas para brindar 12 horas de sol y sombra cada día y la temperatura se asemeja a la de un bosque nuboso, aunque sin los altos niveles de humedad correspondientes.


La obra fue elaborada con 620 toneladas de acero y 2.643 paneles de vidrio y fue levantada en un terreno ubicado entre las dos torres de las oficinas centrales de Amazon en Seattle y es considerada un espacio de trabajo alternativo.


La construcción de Las Esferas no obedece a una simple excentricidad de los directivos de Amazon y, en cambio, sí se relaciona con una estrategia para impulsar la productividad de su personal, tal como lo han venido haciendo otros gigantes tecnológicos como Microsoft, que ofrece a sus ejecutivos lujosas casas en el árbol, Facebook tiene un parque y Apple posee un campus con 7.000 árboles.