Ayer se dio a conocer la sentencia de la justicia. El exproductor del filme había impugnado su proyección 

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11 de mayo de 2018, 4:00 AM
11 de mayo de 2018, 4:00 AM

El Festival de Cannes celebró  ayer  tener la autorización judicial para proyectar en su clausura El hombre que mató al Quijote, del británico Terry Gilliam, y se alegró de que las “tentativas de intimidación" orquestadas por su exproductor, Paulo Branco, no hayan funcionado.

La justicia, según su comunicado, ha confirmado que, “contrariamente a lo que no han cesado de pretender" el exproductor y su abogado, “entre otros ataques difamatorios y mentiras, el Festival de Cannes nunca se ha colocado por encima de la ley".

El Tribunal de Gran Instancia de París decidió ayer autorizar la proyección el 19 de mayo, aunque, según destacó Branco ayer, deberá precisar que su proyección no “prejuzga" los derechos sobre la obra reivindicados por el productor.

Cannes dijo ayer estar “muy contento de que esa película tan singular y de alguna forma dolorosa en la carrera del gran artista que es Terry Gilliam sea desvelada por primera vez ante los periodistas, festivaleros y profesionales del mundo entero" en su clausura.

El festival recordó que Branco y su productora, Alfama Films Production, habían denigrado al certamen ante la prensa y en las redes sociales al afirmar que no tenía derecho de seleccionar esa película. Con la sentencia de ayer, sus organizadores consideraron que el productor ha perdido su derecho a exigir una compensación.