El ministro de Economía, Marcelo Montenegro, señaló que el informe de Moody's no muestra una evaluación exhaustiva de todos los factores que influyen en la economía boliviana, limitando su análisis a las presiones de liquidez en moneda extranjera,

29 de abril de 2024, 11:00 AM
29 de abril de 2024, 11:00 AM

El Gobierno boliviano solicitó una Acción de calificación a Moody’s Ratings sobre su riesgo crediticio y una vez publicado, con la calificación Caa3, debido a las emisiones soberanas que mantiene vigentes. Una vez emitido el informe, el Ministerio de Economía observó que “no considera las políticas económicas que permiten proteger la estabilidad y el crecimiento económico de Bolivia, con medidas sociales y redistribución del ingreso que preservan el bienestar de la población boliviana”, según el ministro de Economía y Finanzas Públicas, Marcelo Montenegro.

De acuerdo al informe emitido el 26 de abril, en el subtítulo ‘divulgaciones reglamentarias’ Moody’s aclaró que la calificación fue solicitada, mientras que, en el portal electrónico de la calificadora, figura el Gobierno de Bolivia, como ‘Nombre de la organización/Transacción’.

La calificación Caa (Caa1, Caa2, Caa3) representa riesgo de crédito muy alto y se asigna a títulos de baja calidad. Presentan riesgo de impago de capital intereses o haber incumplido ya dichos pagos.

En un documento oficial publicado el sábado, el Gobierno señaló que el informe de Moody's no muestra una evaluación exhaustiva de todos los factores que influyen en la economía boliviana, limitando su análisis a las presiones de liquidez en moneda extranjera, tampoco considera las acciones concretas asumidas por el Gobierno para abordar estos temas.

Moody’s, en su informe resumió que la rebaja de las calificaciones refleja la evaluación de que los actuales desafíos de gobernanza y el mayor riesgo político interno han exacerbado las presiones de liquidez externa a niveles críticos como resultado de una disminución persistente de las reservas de divisas que amenazan con una crisis de balanza de pagos.

El analista y ex director del Banco Central de Bolivia, José Gabriel Espinoza, explicó que este tipo de solicitudes se realiza cuando algún agente de la economía -en este caso la boliviana- necesita realizar alguna emisión o quiere generar algún instrumento de financiamiento, que normalmente se hace a través de un banco de inversión.

“El gobierno como tal no lo hizo, pero era parte de los requerimientos que tenía con algún banco que estaba pensando estructurar o generar algún instrumento de deuda para el Gobierno boliviano. Entonces, parte del ejercicio es preguntar a las calificadoras cómo ven al país para poder hacer esa emisión o ese instrumento de deuda”, precisó Espinoza.

El economista presumió que la emisión se podría hacer a través de la titularización de ingresos futuros de YPFB, que está aprobada en el Presupuesto General del Estado (PGE 2024). “Cuando uno solicita la calificación, se somete a que salga buena o mala, porque la calificación debe ser imparcial. Entonces el gobierno, ha debido creer o esperar que Moody´s le dé una calificación optimista o positiva, o quizás mantener el nivel que ya se tenía, que de por sí era malo, tratando de argumentar, utilizando indicadores que el gobierno quiere mostrar y demás”, sostuvo.

Agregó que Moody´s no es un organismo internacional como el Banco Mundial, que se preocupa por la pobreza, o como el BID, que le preocupa la infraestructura. “Es un organismo que califica deuda y lo que le interesa es que esa deuda sea posible repagarla, nada más. Y los indicadores y macros que están relacionados a eso están bastante malos”, señaló Espinoza, al mencionar que el servicio de la calificadora “no es barato”.

Desde el Ministerio de Economía indicaron que realizan las solicitudes de informe a Moody's porque cuentan con emisiones soberanas vigentes y es parte de la normativa internacional que cumple el Estado boliviano.