Para Luis Alberto Sánchez, el panorama de los hidrocarburos en Bolivia es alentador pese a que este año se vence el contrato con Brasil y Argentina impulsa un mega yacimiento

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6 de enero de 2019, 12:08 PM
6 de enero de 2019, 12:08 PM

Luis Alberto Sánchez es optimista. Dice que en los últimos trece años, Bolivia vivió una "época dorada" gracias a la renta de los hidrocarburos y que se viene una temporada mejor, a la que calificó de "época de platino, zafiro o rubí".

"Si se ven obras es porque hay dinero y es proveniente del gas", manifestó en entrevista con Bolivia TV, y dijo que antes de la nacionalización de los hidrocarburos la renta petrolera por año era de 3.200 millones de dólares y que en los trece años posteriores a la nacionalización fue 38 millones de dolares.

Las declaraciones de Sánchez se dan luego de un 2018 en el que no se cumplió el cupo al exterior, el año en el que concluye el contrato de 20 años con Brasil y luego de que Argentina manifestara su intención de bajar las nominaciones de gas boliviano ante la erupción de la explotación de Vaca Muerta, un gigante yacimiento que puede constituirse en un fuerte proveedor de hidrocarburos en la región.

Según el titular de Hidrocarburos, la renta petrolera fue de 2.200 millones de dólares en 2018 y la mitad de ese dinero se destinó a "gobernaciones, alcaldías y universidades y otros";  por lo que todas las obras que se hacen a nivel local son gracias a la política de redistribución del Gobierno central. 

Sánchez informó que el año pasado se han certificado reservas probadas que garantizan cumplir con los mercados de Argentina y Brasil y anunció la perforación de nuevos pozos, por lo que las reservas se van a duplicar en cinco años.