Las esposas de los trabajadores tomaron las oficinas de la firma en Santa Cruz. No aceptan el nuevo sistema de Seguro de Salud Delegado que buscan implementar los directivos

El Deber logo
7 de febrero de 2018, 11:26 AM
7 de febrero de 2018, 11:26 AM

La audiencia de conciliación entre la Empresa Minera Paitití (Emipa) y sus trabajadores, citada por el Ministerio de Trabajo de Bolivia, no obtuvo ningún resultado, ya que los funcionarios de la firma no quieren aceptar ni dialogar nada que tenga relación con el nuevo seguro de salud que se quiere implementar en la compañía, según revelaron algunos asistentes a la reunión.

El Ministerio de Trabajo ha citado para hoy a las 17:00 una nueva reunión para tratar de solucionar el conflicto 

Cabe recordar que el Comité de Amas de Casa Mineras Paitití, que es la asociación de esposas de los trabajadores de Emipa, tomó las oficinas de dicha firma el viernes pasado (2 de febrero). El motivo es que no aceptan el nuevo sistema de Seguro de Salud Delegado que quiere implementar la compañía.

"Lo único que pedimos es que el seguro de salud se mantenga tal como está", expresó Heidi Sánchez, representante del Comité.

Hace tres semanas Emipa inició la ejecución de un plan de mejoras en el Servicio Médico que administra mediante el sistema de Seguro de Salud Delegado, bajo convenio recién renovado con la Caja Nacional de Salud (CNS). Este plan tiene por objeto mejorar la calidad de atención a los trabajadores y sus familias, ajustándose a los términos de ese convenio. Esta era una exigencia de los funcionarios, según los directivos, que ahora se muestran sorprendidos por el rechazo de la medida.

A decir de un grupo de usuarios del sistema de salud actual, a este le falta control y se ha prestado para que algunos trabajadores tengan mejor atención médica que otros (están asegurados en la CNS, pero son atendidos en clínicas privadas). "Esto ha generado 'vicios' que en un principio se aceptaron, pero que deben arreglarse", dijeron. 

Por su parte, Joaquín Zenteno, gerente general de la compañía, indicó que desde antes del inicio del proyecto, intentaron dar a conocer de forma directa y personal, las características y bondades del nuevo plan, pero lo único que obtuvieron fue una respuesta negativa del Sindicato de Trabajadores Mineros Metalúrgicos Paitití.      

El conflicto está poniendo en riesgo la exportación de dos barras doré de oro de alrededor de 80 kilos, valoradas en $us 1 millón destinada a la Casa de la Moneda Real de Canadá, ya que las personas que se encuentran en las oficinas de Emipa, no dejan sacar un equipo necesario para realizar el envío del mineral.

Está situación también perjudica a la Gobernación de Santa Cruz y al municipio San José de Chiquitos (donde opera Emipa), ya que reciben el 85% y el 15% respectivamente, de las regalías que generan las exportaciones de Emipa. 

Está mañana, la empresa asistió con personal médico a un pedido de atención hecho por los trabajadores, las esposas e hijos de estos. Sin embargo, cuando los profesionales llegaron al lugar, los manifestantes se negaron a ser atendidos.