Visita. Luis Enrique Bandera, titular de Fides, estuvo en el país, para anunciar la realización de la Conferencia Hemisférica de Seguros en Santa Cruz en 2019

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2 de octubre de 2018, 4:00 AM
2 de octubre de 2018, 4:00 AM

Luis Enrique Bandera, presidente desde hace poco más de un año de la Federación Interamericana de Empresas de Seguros (Fides), estuvo recientemente en el país para anunciar la realización de la XXXVII Conferencia Hemisférica de Seguros en Santa Cruz en 2019. El evento, que se realizará entre el 8 y 11 de septiembre del próximo año, es promovido por la Asociación Boliviana de Aseguradores (ABA) y contará con la presencia de unos 2.000 ejecutivos de empresas de seguros y reaseguros de todo el mundo.

— ¿Qué factores influyeron en la elección de Bolivia como sede de la Conferencia Hemisférica de Seguros en 2019?

Estamos tratando de que todos los miembros de Fides tengan las mismas oportunidades de realizar el evento, a la vez que ampliamos la posibilidad de que todos participen. ABA ha desarrollado un trabajo muy importante para su país y su mercado de seguros. La institución quería celebrar sus 70 años con la realización de un evento internacional y cuando nos plantearon su propuesta nos pareció apropiada y significativa, tanto para Bolivia como para el resto de la región. Eso fue lo que permitió que Bolivia sea elegida sede de la conferencia. Estamos muy contentos con la decisión.

— En el tiempo que lleva al frente de Fides, ¿cómo se ha comportado el sector asegurador en América Latina?

El 2017 fue un periodo muy interesante. Los cambios tecnológicos, que el sector asegurador está enfrentando, hicieron que las empresas tomen conciencia para trabajar unidas. Anteriormente, había ciertos intereses particulares de algunos grupos como los corredores, que se consideraban diferentes a los de los aseguradores. Hemos identificado que en la mayoría de los países de América Latina existe una gran preocupación por los cambios que pueden venir en el sector debido a las nuevas tecnologías. La innovación disruptiva no va a surgir desde adentro del sector sino desde afuera y como viene desde el exterior, puede ser un peligro para toda la industria. Hay mucha conciencia de seguir esa situación desde cerca, de manejarla bien y sacarle el mayor provecho en la parte institucional de los seguros.

— ¿Qué tipo de seguros son los más requeridos en la región?

Los seguros dirigidos a las personas están creciendo cada vez más. Existe un gran potencial en el sector y en los seguros de daños. En términos generales, los bienes asegurables se están asegurando y crecen en función del desarrollo económico de los países. En cambio, los seguros de personas tienen un margen más amplio de desarrollo, aunque un país registre un crecimiento bajo o moderado. En el ramo de vida ocurre algo similar, no importa si la economía crece a tasas bajas o altas, tienen espacio para desarrollarse. Por eso es que existe una captación mayor en seguros de vida y de salud, con respecto a la de ramos generales. Gracias a las nuevas tecnologías además se está llegando a nuevos mercados, y otros se están ampliando. Un ejemplo de ello son los seguros en la banca. En la actualidad, con los nuevos canales de comercialización a través de instrumentos digitales, se están atendiendo mercados que estaban desatendidos.

— ¿Las personas en América Latina tienen predisposición para adquirir seguros?

Se está trabajando mucho en la educación financiera, que implica también que se tome conciencia en la parte de los seguros. Adicionalmente, por situaciones producidas por catástrofes naturales, como terremotos y huracanes que han ocurrido en países como México y Puerto Rico, organismos internacionales están presionando a los gobiernos para que modifiquen sus políticas públicas y permitan una mayor inclusión de la población en los seguros. Es triste cuando ocurren estos eventos catastróficos, a veces el nivel de cobertura es bajo porque la penetración de seguros no es muy amplia. Por un lado se está buscando que la penetración de seguro crezca y por otro lado, se pretende que los bienes del Estado estén asegurados. Es muy lamentable que ante eventos catastróficos se pierdan inversiones muy grandes de los gobiernos o de los Estados. Eso también impacta negativamente en las personas a través de la disminución de presupuestos.

— En Bolivia existe una empresa estatal que opera en el sector asegurador, ¿esa situación ocurre en otros países?, ¿cómo impacta en el mercado?

En otros países sí se tienen empresas estatales de seguros, pero la tendencia no apunta en ese sentido, sino hacia la apertura de mercados. En otros países, como Costa Rica, donde existió un monopolio estatal, se abrieron a la competencia. Las compañías estatales pueden convivir con las otras firmas, siempre y cuando operen bajo las mismas reglas y parámetros que rigen al sector asegurador en general. Lo más importante para el negocio es que no se creen monopolios de forma artificial, ya que eso genera una falta de competencia, que causa peores condiciones para los clientes.

— ¿Cuáles son las perspectivas del sector asegurador regional para el mediano plazo?

Son muy positivas. Recientemente se realizó un estudio que reveló que en todos los mercados de América Latina se puede crecer. El sector asegurador tiene espacio para desarrollarse con las condiciones normales. Si a eso se suma la posibilidad de que se apliquen políticas públicas que incentiven el desarrollo del negocio, se puede crecer aún más. Una prueba de ello es la inversión extranjera que se realiza en compañías de seguros de América Latina.

PERFIL

Luis Enrique Bandera asumió la presidencia de la Federación Interamericana de Empresas de Seguros (Fides) el año pasado. Fue postulado al cargo por la Asociación Panameña de Aseguradores. Es gerente general de la empresa Seguros de Panamá. Comenzó a trabajar en el campo asegurador en la firma Munich Re. Uno de sus sueños siempre fue desempeñar algún cargo en Fides.

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