Desafío. El ejecutivo, con más de 20 años de trabajo en el sector de consumo masivo, no tuvo la menor duda en postularse para el cargo de director general de Belcorp Bolivia

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2 de julio de 2019, 4:00 AM
2 de julio de 2019, 4:00 AM

—¿Cómo se propició su llegada a la dirección general de Belcorp Bolivia?

Mis más de 20 años de experiencia trabajando para una multinacional de consumo masivo, en diferentes países de América y Europa, me permitieron ser invitado por una reconocida firma de ‘head hunting’ para formar parte del proceso de selección. Luego de más de cuatro meses, entre pruebas, entrevistas y visitas a campo, recibí con gran emoción y orgullo la confirmación de haber sido elegido para ocupar la posición de director general en Belcorp Bolivia.

Tratándose de una empresa de la talla de Belcorp, este encargo viene acompañado de una gran responsabilidad, la cual implica los más altos niveles de compromiso y pasión por lo que uno hace. Belcorp es una empresa que lleva más de cinco décadas generando oportunidades de negocio para mujeres emprendedoras. Tiene presencia en 14 países y cuenta con más de 7.500 colaboradores firmemente comprometidos con nuestro propósito corporativo: impulsamos belleza para lograr realización personal.

—En el tiempo que lleva liderando la firma, ¿cuál ha sido el mayor desafío que ha enfrentado?

Teniendo las credenciales para manejar cualquier negocio de consumo masivo luego de mis experiencias previas en Perú. Venezuela, México y España, el mayor desafío pasa por entender e ‘internalizar’ muy rápidamente las particularidades del modelo de negocio de la venta directa, con la finalidad de hacer aportes significativos, que se puedan evidenciar en el corto plazo, tanto para nuestro negocio como para los de las miles de mujeres emprendedoras que generan ingresos para sus familias mediante la venta directa de productos de belleza Belcorp.

—¿Cómo evalúa ese periodo?

Trabajar en una empresa que vive su propósito (impulsamos belleza para lograr realización personal) cada día, en todos los niveles de la organización, es sin duda alguna apasionante y motivador. Además, poder impactar a tanta gente de manera positiva, con energía y convicción, es gratificante.

— Con respecto al sector de consumo masivo, en el cual se desempeñó por más de 20 años, ¿cuál ha sido la mayor diferencia que ha detectado?

Este negocio tiene unas particularidades muy especiales que son todo un reto para lograr los resultados que se esperan. Me ha tocado entenderlas muy ágilmente para poder realizar aportes significativos en el corto plazo, que es lo que esperan de mi persona como director general de la compañía. A diferencia del sector de consumo masivo, donde se tienen 12 meses al año para vender, en el sector de venta directa se tienen fechas muy marcadas para desarrollar campañas.

—En la actualidad, la economía de Bolivia está atravesando por un proceso de desaceleración, ¿cómo lo está afrontando la organización?

En Belcorp, uno de nuestros principios de liderazgo más importantes es imaginar lo extraordinario y ello pasa por siempre estar en la búsqueda de nuevas formas para hacer crecer el negocio, aun en condiciones adversas, llevando la creatividad al límite como producto de los desafíos que nos toca enfrentar en los mercados dinámicos en los que nos encontramos. En Belcorp estamos comprometidos con el mercado boliviano y las miles de consultoras independientes en el país.

—Ser uno de los mejores lugares para trabajar de Bolivia, según Great Place to Work, ¿permite encarar de mejor manera los ciclos adversos?

Es fundamental desde dos puntos de vista. Primero, porque te permite como marca empleadora ser muy atractiva para el mejor talento del país y fuera de él. Por otra parte, todo lo que logramos lo hacemos gracias a nuestros colaboradores y a esa milla extra que siempre dan, al compromiso y el desafío de retarse cada día, para aprender nuevas formas de hacer crecer nuestro negocio.

—¿Cuáles considera que son las mayores amenazas del sector en el que opera la compañía?

Creemos en la libre competencia, la cual le otorga al consumidor el derecho de poder elegir los productos que más satisfacen sus necesidades, y respetamos a todos nuestros competidores formales que se rigen por un principio; sin embargo, existe competencia informal, como son los productos de contrabando o falsificados, la cual desnaturaliza este principio básico de mercado, pero confiamos en las autoridades y en los mecanismos de control.

—¿Cuáles son las perspectivas de Belcorp Bolivia para lo que resta de 2019?

Estamos enfocados en consolidar nuestro liderazgo en el mercado boliviano mediante una ejecución impecable de estrategia comercial, apoyados en nuestro sólido portafolio multimarca (Ésika, L’Bel y Cyzone) y soportados por nuestra mayor riqueza: nuestra gente. Cada uno de nuestros colaboradores son personas motivadas por el desafío constante y el aprendizaje, comprometidas con nuestro propósito y guiadas por nuestros valores: somos emprendedores, somos cercanos, somos apasionados y somos auténticos.