Apuesta. El agro, la industria de alimentos y la manufactura textil son las áreas que interesan a la institución japonesa

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6 de agosto de 2019, 4:00 AM
6 de agosto de 2019, 4:00 AM

Tras cuatro décadas de trabajo en Bolivia, la Agencia de Cooperación Internacional del Japón (JICA), gira su mirada hacia el sector privado para impulsar distintos proyectos.

Yoshida Satoshi, director general de JICA para América Latina y el Caribe, destacó el trabajo realizado hasta el momento y remarcó que la cooperación japonesa se centró en salud, infraestructura, energía y proyectos productivos a cargo del Gobierno nacional que desde la agencia nipona financiaron.

Satoshi precisó que para el próximo año, JICA apostará por financiar proyectos privados, sin descuidar los acordados con el Gobierno boliviano. Así, para febrero está prevista la llegada al país de 15 pequeñas y medianas empresas (pymes) japonesas que buscarán conocer la realidad económica y productiva de Bolivia para luego evaluar posibles inversiones.

El representante japonés explicó que en su país el 90% de la matriz productiva se apoya en las pymes y por eso considera importante que los emprendedores bolivianos tengan la oportunidad de intercambiar información con sus pares nipones.

“Consideramos que los sectores ligados al agro, al procesamiento de alimentos y a la actividad textil son los que llegarán a Bolivia”, explicó Satoshi.

Sobre esta mirada a los privados, Satoshi detalló que se debe a que el sector se caracteriza por trabajar a mediano y largo plazo por lo que considera que es una gran oportunidad para financiar proyectos que buscan mejorar la productividad o dotar de valor agregado a la oferta boliviana.

Luis Barbery, presidente de la Confederación de Empresarios Privados de Bolivia, destacó la iniciativa y subrayó que el sector tiene varias proyectos , pero muchas veces no cuenta con los recursos económicos necesarios.

La apuesta para 2019

Toshihiro Nakajima, asesor de formulación de Proyecto de JICA, indicó que se seguirá trabajando financiando iniciativas en donde el Estado participe. Uno de ellos es el finaciamiento reembolsable, a 30 años, para construir una planta geotérmica en Laguna Colorada (Potosí) un emprendimiento que requirirá unos $us 500 millones, algo que es considerado una apuesta fuerte de JICA.

Otro emprendimiento con apalancamiento japonés es la pavimentación de la carretera a Okinawa, una obra de 20,6 kilómetros con una inversión de $us 40 millones, un dinero que en su totalidad será donado por JICA.

Nakajima detalló que otro proyecto con donación son los trabajos de medidas preventivas de desastre en la Red Víal Fundamental de la carretera 7, el mismo demandará $us 15 millones y también será bajo el sistema de donación.