Las redes sociales son un nuevo escenario de debate, los políticos empiezan a buscar ahí el apoyo de los más jóvenes

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20 de noviembre de 2017, 6:26 AM
20 de noviembre de 2017, 6:26 AM

La administración pública es una trituradora de militantes”, dice la senadora masista Adriana Salvatierra. Ella es la cabeza visible de Columna Sur, la juventud masista más ideologizada.

Cree que hay que llegar a los jóvenes para saber qué tipo de democracia quieren, cómo la ven, transparentar más la información del Estado a través de las redes sociales, lograr más interacción ciudadana y ajustar la administración pública a este tiempo. Sin embargo, ve que su partido cumplió con los jóvenes no solo con la agenda 2025, sino al constitucionalizar que desde los 18 se puede ser autoridad electa.

Vladimir Peña, jefe departamental de Demócratas, cree que su partido debe abrirse a los jóvenes, utilizar las redes como métodos, pero ya están implementando otras medidas: formando a sus juventudes en congresos internacionales y abriéndose a interactuar en los espacios de los no militantes, como los voluntariados. También preparan un diálogo a escala nacional para construir de manera participativa su propuesta de plan de Gobierno para las elecciones de 2019.

Uno de los millennials con mayor influencia política en las redes sociales es Federico Morón y está creando un colectivo que traduce información para los jóvenes sobre todos los niveles de Gobierno. Su intención es aumentar “el músculo ciudadano” para que ponga sus verdaderos problemas en la agenda de los políticos. 

“Lo más interesantes es que los políticos saben que tienen que estar en las redes. Sus asesores les han dicho que deben crear una comunidad de gente que los siga, pero están jodidos. Las viejas artimañas que usaban para seducir a la gente ya no funcionan, porque en las redes los políticos se ven como el Señor Burns disfrazado de rapero”, dice Morón.  

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