La Cancillería de Bolivia tomó contacto con la familia del joven que fue condenado a morir en la horca por tráfico de drogas. Su familia busca que se le conmute la pena y que sea extraditado al país

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24 de febrero de 2018, 12:55 PM
24 de febrero de 2018, 12:55 PM

El Gobierno boliviano inició una serie de gestiones para precautelar la vida del compatriota que fue sentenciado a morir en la horca en Malasia al ser descubierto traficando cocaína. Esperan poder evitar la drástica pena.

"Nosotros defendemos la vida, somos de la cultura de la vida, nuestra Constitución no contempla la pena capital, la pena de muerte, nosotros tenemos la obligación de defender los bolivianos y por su puesto que lo vamos a hacer", aseveró, en conferencia de prensa el ministro de la Presidencia, Alfredo Rada.

El ministro de la Presidencia, Alfredo Rada, durante la conferencia de prensa | ABI

Víctor Eduardo Parada Vargas fue detenido a finales de 2013 en la ciudad de Kuala Lumpur (la mayor de Malasia y la capital nacional legislativa) con 450 gramos de cocaína, repartida en diferentes cápsulas plásticas que había ingerido para ser una mula del tráfico de drogas internacional.

Mediante Cancillería la administración del presidente Evo Morales inició acercamientos a través de las embajadas del Estado Plurinacional en Japón y en Perú, debido a que el país no tiene una representación diplomática en el país asiático.

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Rada agregó que se tomó contacto con la familia y anunció que la Cancillería dará un informe al respecto. "Estamos en la obligación de defender la vida de todo boliviano tanto dentro como fuera del país", enfatizó.     

Detalló finalmente que "todas las vías diplomáticas de derecho internacional yv tratados defienden la vida, también nuestra Constitución. En todo país hay instancias de juzgamiento y apelación. Nosotros como Gobierno vamos a defender el derecho a la vida".