El presidente Evo Morales ratificó la decisión de entregar departamentos a las familias que perdieron sus casas en el desastre

El Deber logo
5 de mayo de 2019, 15:39 PM
5 de mayo de 2019, 15:39 PM

El presidente Evo Morales visitó el domingo la zona del deslizamiento en bajo Lloteja de La Paz y escuchó en persona las demandas de las familias damnificadas producto de ese desastre, que se encuentran temporalmente en carpas instaladas en la cancha Fígaro.

"Vamos a seguir buscando", respondió el primer mandatario al pedido de los familiares de las personas que continúan desaparecidas tras el deslizamiento.

El mandatario volvió a manifestarse en favor de la entrega de departamentos a las familias que perdieron sus casas en el desastre y dijo que también se buscará dar viviendas a los inquilinos que resultaron afectados por el deslizamiento.

Con lágrimas en los ojos, las familias damnificadas se acercaban al jefe de Estado para contarles su situación y agradecían las acciones que lleva adelante el Gobierno para intentar reponer la pérdida que sufrieron.

"Hermanas y hermanos no les vamos abandonar", subrayó Morales.

El deslizamiento colapsó 68 viviendas multifamiliares, además dejó en riesgo otras 22 que serán demolidas y 26 que están en evaluación para determinar su destrucción, de acuerdo al Ministerio de Defensa.

"Estamos agradecidos por su presencia, sabemos de su buen corazón", le decían las familias al primer mandatario, quien dijo que se seguirá atendiendo a los damnificados.

Morales, además, indicó que los damnificados que tenían deudas en los bancos podrán reprogramar esos créditos, en base a una evaluación que hará el Ministerio de Economía.

El Presidente anunció que volverá mañana, lunes, al lugar, para ir en caravana con las primeras familias damnificadas que recibirán sus departamentos de tres habitaciones.