Morales dijo que ayer, en Ilo, acordaron con el Gobierno de Perú la construcción de un gasoducto hacia Ilo, donde pretenden levantar una planta de GNL para enviar gas a otros mercados internacionales  

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26 de junio de 2019, 16:06 PM
26 de junio de 2019, 16:06 PM

El presidente Evo Morales hizo público este miércoles su deseo de vender gas boliviano a India y China a través de una planta de licuefacción de gas natural (GNL) en el puerto de Ilo, proyecto que es abordado dentro del marco de acuerdos bilaterales que encaran Bolivia y Perú.

Ayer, en la ciudad costera de Ilo se desarrolló el V Gabinete Binacional, en donde Morales y su par peruano, Martíz Vizcarra, sellaron acuerdos relacionados al sector hidrocarburífero.

“Quiero decirles que hemos acordado construir un gasoducto a Ilo, océano Pacífico en Perú, para instalar otra planta de GNL, más conocido como congelar gas, y de ahí mandar gas a otros continentes, China o India, cuando el presidente de India nos visitó dijo: estoy dispuesto a invertir $us 13.000 millones en hidrocarburos”, explicó Morales.

Las declaraciones del mandatario boliviano fueron vertidas en la población cochabambina de Sacaba, donde hizo la entrega de la represa Belén Pampa, en el cantón Lava Lava, que beneficiará a 395 familias agricultoras.

El jefe de Estado agregó, sin dar cifras ni fecha, que Bolivia empezará a exportar gas licuado de petróleo (GLP) al mercado peruano y reiteró el proyecto que involucra a la estatal petrolera para instalar gas domiciliario en ciudades del sur peruano.

“Ayer, con el presidente de Perú firmamos exportar gas en garrafas (GLP), pero no solo eso, además se ha firmado un acuerdo para instalar gas a domicilio mediante YPFB en coordinación con Petroperú. Vamos a empezar en Desaguadero, posteriormente Puno y casi todo el sur de Perú”, acotó.

YPFB cuenta con una planta de GNL en Río Grande, en el departamento de Santa Cruz, que fue inaugurada el 15 de febrero de 2016. Alimenta de gas natural a más de 20 poblaciones rurales alejadas de los centros urbanos y de las redes de gasoductos a través de estaciones satelitales de regasificación (ESR) instaladas en las poblaciones que descomprimen el combustible transportado en cisternas criogénicas.

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