Los dirigentes del Colegio Médico de Bolivia se levantaron y abandonaron las instalaciones del Ministerio de Salud porque sus propuestas no fueron consideradas 

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7 de diciembre de 2017, 19:20 PM
7 de diciembre de 2017, 19:20 PM

El diálogo entre el Colegio Médico y el Gobierno no pudo sostenerse menos de una hora y media, y volvió a romperse, pasadas las 19:00, después de que los dirigentes del sector se levantaron y abandonaron las instalaciones del Ministerio, con lo que el paro que lleva ya dos semanas continúa.

La ministra de Salud, Ariana Campero acusó a la dirigencia paceña de radicalizar su posición en las negociaciones. Afirmó que es la dirigencia de La Paz la que no tiene ninguna intención de solucionar el problema ni siquiera intenta participar en la elaboración de un nuevo decreto

"Según ellos tienen fundamentos técnicos y nosotros demostramos cuál es el fundamento, además les hemos mostrado las actas en las que ellos acuerdan que se fiscalice al médico privado y público; ellos aceptaron a la Autoridad de Fiscalización de Salud Pública y Privada y lo firma el doctor Larrea y ahora rompe el diálogo, lamentamos mucho, las otras entidades no pudieron hacer uso de la palabra", dijo la ministra después del frustrado encuentro.


La autoridad afirmó que ellos seguirán esperando el retorno a la mesa de negociación de la dirigencia médica aunque las protestas no bajan. De hecho hoy la protesta de médicos y estudiantes incluso derivó en acciones de la Policía que dispersó a los manifestantes antes de la reunión en el Ministerio de Salud.

El presidente del Colegio Médico, Luis Larrea, explicó que la ruptura no se produjo porque el Gobierno no está dispuesto a modificar el tema de la fiscalización del sistema público, e insiste una vez más en quitar las competencias que corresponden a las alcaldías y los municipios.

Esta mañana el Gobierno nacional dispuso analizar desde cero el decreto que crea una entidad de fiscalización y control mientras que desde el Legislativo ratificaron su apertura para las sanciones ante hechos de negligencia dentro de un artículo que aún no fue aprobado por el Senado.

Estudiantes de medicina y algunos profesionales del área fueron reprimidos con agentes químicos por parte de la Policía, debido a que cercaron los accesos al edificio de esa cartera de Estado minutos antes del acercamiento, inicialmente previsto para las 15:00.