Cusi quiere ser fiscal general y ofrece investigar a masistas

Gualberto Cusi, el exmagistrado que fue removido del Tribunal Constitucional Plurinacional en medio de una dura polémica con el partido del presidente Evo Morales, anunció anoche que buscará habilitarse como candidato a la Fiscalía General del Estado. Para ello -dijo- alista los requisitos para inscribirse en la Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP) y dispone de una propuesta: cambiar el Ministerio Público investigando de oficio casos de corrupción pública “sean masistas o no”.

“Quizás esto no le va a gustar al MAS, pero yo creo que esto es lo que quiere el pueblo boliviano: que la justicia investigue la corrupción, sean masistas o no los que resulten acusados”, manifestó en contacto con EL DEBER.

Dado que es la Asamblea Legislativa Plurinacional la que debe elegir al reemplazante de Ramiro Guerrero para fiscal general y que el MAS controla a más de 2/3 de los legisladores, se consultó a Cusi si cree que tiene oportunidades para resultar elegido, a lo que él respondió: “Quizás al MAS no le guste mi propuesta, quizás sea difícil, pero igual voy a intentarlo”.

Cusi ya fue procesado en esta legislatura por la Asamblea Plurinacional y fue defenestrado del puesto de tribuno tras una agria polémica con el MAS que se extendió entre 2014 y 2017. En medio de ella, el magistrado, que sugirió que usaba la lectura de la coca para orientar sus decisiones judiciales, endureció su postura en contra del Gobierno del presidente Morales.

Albarracín y Gonzales

Por otra parte, tal como ocurrió durante la preselección de candidatos a autoridades judiciales en 2017, ayer Waldo Albarracín, rector de la Universidad Mayor de San Andrés (UMSA) de La Paz, salió al paso para desacreditar el proceso de elección que lleva a cabo la Asamblea Plurinacional en busca de un reemplazante para Ramiro Guerrero. Al respecto, José Alberto Gonzales, presidente del Senado, dijo que el compromiso del sistema universitario con el proceso va más allá del cálculo político.

Incluso usó razones parecidas a las que planteó para las judiciales: el partido de Evo Morales controla más de 2/3 de la Asamblea y puede prescindir de la oposición para elegir al representante del Ministerio Público, por tanto, dadas las reglas del juego, la participación del sistema universitario para calificar a los aspirantes es “un teatro”.

“La UMSA no se va a prestar a ese juego. Si hay algunas universidades que se van a prestar a ello, que lo hagan, pero la UMSA es digna, es autónoma, está integrada por docentes y estudiantes con dignidad y, por lo tanto, no nos vamos a prestar a ese juego sucio”, dijo Albarracín, según cita Erbol.

Acto seguido, Albarracín remarcó que la UMSA “no se va a prestar a una especie de teatro” donde sale la convocatoria, se presentan los candidatos, pero “el desenlace final es que terminan ocupando cargos personas absolutamente subordinadas al poder político”. Gonzales, según ABI, contestó que “este es un compromiso que va más allá de los cálculos políticos que pueda estar haciendo un rector”. En tanto que el diputado Lino Cárdenas calificó de ‘dictatorial’ a Albarracín y que él no puede decidir solo por la UMSA.