Bolivia cierra filas por la demanda marítima

En las tres horas y 40 minutos que duró la reunión se dejaron a un lado las diferencias políticas y se habló de los planes que se podrían ejecutar posterior al fallo de la demanda marítima. Pero en ese tiempo también se abordó el 21-F, algo que Evo Morales tomó con calma. En Santiago el panorama es más difícil. El mandatario del vecino país, Sebastián Piñera, endureció su discurso y sigue aferrado al Tratado de 1904.

Salón Illimani del piso 22 de la Casa Grande del Pueblo. En ese espacio recibió Morales a sus invitados a 13 días de la lectura del fallo de la demanda marítima. A la nueva casa de Gobierno llegaron los expresidentes Jaime Paz Zamora, Guido Vildoso, Carlos de Mesa y Jorge Quiroga y los excancilleres Carlos Iturralde, Gustavo Fernández, Javier Murillo, David Choquehuanca y Fernando Huanacuni.

En la cita también estuvieron el vicepresidente Álvaro García, el canciller Diego Pary; el ministro de la Presidencia, Alfredo Rada; el ministro de Justicia, Héctor Arce; y el director de la Dirección de Reivindicación Marítima (Diremar), Emerson Calderón.

El encuentro fue ameno. Morales hizo bromas mientras la prensa registraba la cita. De Mesa se mostraba serio, lo contrario Paz Zamora, que reía mucho. Quiroga lanzaba sonrisas y Vildoso tenía un rostro medianamente feliz. Los excancilleres miraban a todos los lados.

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Las conclusiones

La reunión duró tres horas y 40 minutos. Morales bajó en uno de los ascensores con los expresidentes al piso 2 del nuevo edificio. De ahí caminó hacia las gradas del hall. Seguía haciendo bromas y esta vez una directa a Paz Zamora. Después brindó las conclusiones del encuentro.

“Estoy seguro que con estas reflexiones que hicimos de manera conjunta Bolivia nunca jamás va a renunciar a nuestra reivindicación”. Con esa frase inició el jefe de Estado su mensaje. Luego expresó su optimismo por el fallo y detalló que la “justicia y la verdad” están del lado boliviano. También resaltó que la demanda marítima es un tema de Estado y que existe unidad al respecto.

Su colega chileno, Sebastián Piñera, subió el tono de su discurso y remarcó que los tratados, en referencia al de 1904, deben ser respetados por países “honorables”. En dos mensajes vía Twitter respondió al pedido de Morales de encontrar “fórmulas de entendimiento” en una nueva era en la relación bilateral.

“Pdte. Morales: los países honorables honran los tratados que firman. En 1904, más de 20 años después de finalizadas las hostilidades, Chile y Bolivia, en forma libre y voluntaria, firmaron un Tratado, hoy plenamente vigente, que fijó en forma muy clara los límites entre ambos países (sic)”, escribió el presidente Piñera en su cuenta de Twitter.

Minutos después, redactó: “Chile ha estado siempre dispuesto a dialogar con Bolivia, dentro del marco del respeto a los tratados vigentes. A mis compatriotas les aseguro que, como siempre lo ha hecho, Chile cumplirá y hará cumplir el Tratado de 1904 y sabrá defender su territorio, su mar y su soberanía”.

Las diferencias políticas en la reunión con Morales no fueron calladas. Aún así, se mostró unidad a pesar de la disparidad. Paz Zamora afirmó que la exigencia de respeto a los resultados del referendo del 21 de febrero de 2016 se inmiscuyó en el consejo consultivo sobre la causa marítima.

“Menos mal que he podido hablar de esas cosas con el presidente, pero en eso (la democracia) las cosas están como están. Se habló ahí del 21-F, pero tampoco nos han convocado para eso”, reveló el expresidente, que luego señaló que prefiere un país “democrático, libre, aunque sin mar”.

Quiroga también manifestó su punto de vista y lo expresó a Morales, quien, según fuentes que estuvieron en el encuentro, no respondió a los pedidos y se mantuvo callado en esos instantes

“Mar con democracia y con respeto al 21-F”,redondeó Quiroga. Mientras que De Mesa se limitó a explicar los ejes de la reunión y dijo que su condición de vocero continúa vigente.