Para las siguientes audiencias cinco abogados de oficio defenderán a los exministros de Jeanine Áñez

6 de mayo de 2024, 18:35 PM
6 de mayo de 2024, 18:35 PM

En la audiencia inicial del juicio por el caso gases de Ecuador, el Tribunal Segundo de Sentencia declaró la rebeldía de los exministros, Arturo Murillo, Luis Fernando López y Roxana Lizárraga e instruyó que se les asignen abogados de oficio para asistir a las audiencias. Las exautoridades están expuestas a 30 años de presidio, de acuerdo con la petición de la Fiscalía de La Paz.

Como reloj suizo a las 14:00 de este lunes se inició el juicio contra los exministros y otros siete acusados por los delitos de tráfico de armas e incumplimiento de deberes. En la audiencia se hizo conocer la ausencia de los principales implicados, por lo que el juez accedió la declaratoria de rebeldía.

“El 19 de noviembre de 2019 se ha realizado una reunión de alto nivel en Palacio de Gobierno, donde los exministros del entonces gobierno de la señora (Jenaine) Áñez con personal policial y militar han sostenido reuniones para coordinar un recojo, en calidad de préstamo, de material de agentes químicos de la república del Ecuador, es así que se ha realizado un operativo militar policial”, declaró el fiscal Bladimir Bolívar.

De acuerdo con el informe del proceso, los que fueron declarados rebeldes en esta primera audiencia son: Carlos Arturo Murillo Prijic, Luis Fernando López Julio, Roxana Lizárraga Vera, Carlos Orellana Centellas y Jorge Adhemar Terán Mendoza. Los otros cinco procesados sí cuentan con abogados defensores.

Los gases

Según la tesis de la Fiscalía, la reunión para pedir el préstamo de gases a Ecuador se realizó el 19 de noviembre en palacio y dijo que esos gases sirvieron para la gasificación y muertes producidas en Sacaba y Senkata. Sin embargo, la represión en Sacaba, Cochabamba se produjo el 14 de noviembre, cinco días antes del trámite de préstamos; y la de Senkata fue el 19 de noviembre el mismo día que se estaba realizando la reunión en palacio de Gobierno.

En julio de 2020 el entonces ministro Murillo declaró públicamente que tenían arsenal para gasificar durante 6 meses seguidos y también dijo que habían recurrido “a amigos” que les habían facilitado las armas no letales.